Bustos de la raza
Los Bustos de la raza forman parte de una serie escultórica que recoge el objetivo de Julio Antonio de esculpir representantes del pueblo, hombres y mujeres anónimos, considerados como algo fundamental de la raza, de acuerdo con los planteamientos que eran comunes en la mayor parte de los representantes del movimiento literario español conocido como la Generación del 98, particularmente sus amigos escritores Ramón Gómez de la Serna y Eugenio Noel.
Para hallar a sus modelos, en 1908, Julio Antonio inicia un viaje por España, acompañado del pintor Miquel Viladrich, a la búsqueda del contacto directo con la realidad del país, de aquellos personajes que trascienden la individualidad para convertirse en un eterno presente.
“Julio Antonio tomó la resolución de echarse por tierras de España en busca de verdaderos tipos de raza.” (Juan de la Encina)
Durante el año 1909 realiza Minera de Puertollano, Rosa María, Mujer de Castilla, Ventero de Peñalsordo y, al año siguiente, Hombre de la Mancha y Minero de Almadén.